
5 COSAS QUE NO DEBES OLVIDAR EN LOS MOMENTOS DIFÍCILES
Se que a veces nos sentimos perdidos, que pensamos que todas las cosas malas posibles nos pasan a nosotros o a la gente que queremos, que a ratos ya no tenemos fuerzas para continuar, o que no sabemos cómo continuar, o que ya no tenemos palabras de aliento que dar… y a ratos está bien sentirse así, no siempre tenemos que tener las palabras exactas, las respuestas a todo lo que nos pasa, o pasa en la vida, pero lo importante en estos casos, es que siempre tengamos presente ciertas cosas que al final del día nos van a ayudar a sentir mejor.
No perdamos la objetividad de las cosas, cuando pensamos o sentimos que todo va mal, es probable que tendamos a ver todo más terrible de lo que realmente es, tratemos de mantener la calma y no nos dejemos ganar del miedo, la angustia, la tristeza, etc.
Debemos saber que todas las cosas que nos pasan son pasajeras, que han venido para enseñarnos algo, y que de nosotros depende que podamos interiorizar esa experiencia de la mejor manera, que siempre podemos aprender a ser más resilientes.
Saber también que no estamos solos/as, que tenemos a muchas personas a nuestro alrededor que estarían dispuestas a ayudarnos y a acompañarnos en estos momentos difíciles, a veces, nos pensamos y nos sentimos completamente solos, pero no necesariamente es así, solo que a ratos, solo no queremos dejar entrar a nadie.
Aprendamos a pedir ayuda, quitemonos esas ideas de la cabeza que siempre tenemos que estar/ser “fuertes”, que no podemos dejarnos caer, que llorar está mal, que es un signo de debilidad; la vida no es así, está bien y es necesario entendernos y aceptarnos como seres humanos, con muchas fortalezas, pero también con ciertas debilidades, y que somos seres sociales, por ende necesitamos fortalecer esas relaciones interpersonales que tanto nos enseñan y nos fortalecen.
Busquemos soluciones y no dejemos que estas cosas nos sobrepasen, siempre hay diferentes caminos que podemos seguir, no estamos perdidos, solo que no siempre es tan fácil ver la salida.
En ocasiones es necesario contar con un lugar donde sea más fácil hablar de estas cosas, donde tengamos la libertad de decir lo que sentimos sin miedo, sin culpas, sin cargas, si es esto lo que crees que necesitas, busca ayuda de un profesional, te puede ayudar mucho. No estás solo.